domingo, 13 de diciembre de 2015

La gota del sol

Si hay algo que le gusta a la ciudad que respira por las alcantarillas y que nos guiña con sus semáforos, es hacer sufrir. Buenos Aires nos hace transpirar la gota gorda. Es el subte que se va, el bondi que no para o el tren demorado. Es el asfalto que nos abraza con su calor. Es el insulto al aire, que rebota entre veredas y puede herir hasta al peatón más atento.

sábado, 12 de diciembre de 2015

El abrazo

Y estaba vez no le hizo falta nada más que abrazar el deseo sexual y masturbarse sin parar durante dos horas seguidas. Esa era su condena. No poder dejar de abrazar. No poder evitar que sus brazos abstractos sientan el calor del deseo que sale de las tripas y se desparrama por todo el cuerpo. La inevitable necesidad de llegar al placer. Placer de monos. Abrazo de humanos.